En nuestro día a día estamos acostumbrados a entrar en una tienda, ver el precio y decidir si comprar o no un determinado producto. Para nosotros, «negociar» una compra es una situación relativamente incomoda, aunque esto es algo natural en muchos otros países.
Antes de prepararnos para nuestro viaje a Marruecos 🇲🇦, es importante conocer cómo funciona la negociación, qué debemos tener en cuenta y por qué es importante conocer sus entresijos ya que una vez allí el precio de un producto será parte de nuestra responsabilidad.

En cualquier caso, durante el proceso de negociación, es importante entender que el asunto no va sólo sobre dinero, detrás de ello hay un tema cultural y de sentimientos de ambas partes.
1. Haz los deberes
Lo primero que deberemos saber, es dónde comprar los productos que busquemos. Cada ciudad en Marruecos suele ofrecer productos característicos, por lo que si buscamos algo específico deberemos tener en cuenta en qué punto del viaje queremos buscarlo.
Si bien en los mercadillos y zocos podremos encontrar de casi todo, vale la pena investigar dónde podemos conseguir los productos que buscamos, ya sean cerámicas 🏺, telas, alfombras , etc. Por ejemplo, aquí podemos ver las especialidades de las principales ciudades:
Casablanca: aquí encontraremos prácticamente de todo, en el zoco de Nueva Medina podremos comprar alfombras, bisutería 💍, babuchas, vestidos de fiestas, chilabas …En el zoco del cobre encontraremos todo tipo de bandejas y herramientas de cobre y latón

Safi: objetos de cerámica
Fez: alfombras en el zoco de Tillis, tejidos como chilabas y chaftanes, bordados, gorros moriscos y artesanía varia en Kissaria Serrajine.

Mequinez o Meknes: damasquinado: objetos de metal con incrustaciones de plata como platos, jarrones…joyas 💎 en Kiseria-Dahab, productos de decoración de hojalata, artesanía de mimbre, babuchas y ropa a base de lana. También azulejos conocidos como Zellij (o Zellige) y cerámica de barro.

Essaouira: artesanía de madera de Tuya, joyas, rafia (mimbre), telas y confección, aceite de argán… Además podemos encontrar instrumentos musicales de cuerda 🎸como el laud , el gumbri y el tamboril.
Taroudant/Taliouine: aquí podremos comprar azafrán incluso a pie de carretera.
Ouarzazate / Tazenakht: Alfombras, cerámicas de todo tipo y dagas preciosas 🗡.
2. Tantea el terreno
Una vez en el terreno, bien sea en mercadillos, puesto de carretera o zocos, te podrás sentir abrumado por la cantidad de sensaciones que llegan a ti de golpe: montones de tiendas rodeadas de gente, olores de todo tipo que a veces cuesta identificar y multitud de gente hablando. En especial los dueños de los puestos que son capaces de chapurrear multitud de idiomas. Pero relájate y disfruta: aquí es donde empieza lo divertido!🤩
Antes de lanzarte a la aventura a comprar esa alfombra que te ha encantado o ese bolso de viaje con montones de colores, hay que averiguar cuanto debería ser el precio mas o menos realista a pagar.
Si tienes algún conocido en la zona, posiblemente será lo mas sencillo preguntarle directamente a esta persona cuánto sería lo máximo que estaría dispuesto a pagar, y este número lo podrás usar de referencia. O cualquier trabajador del alojamiento que nos inspire confianza podrá darnos un valor de referencia que también puede ser útil.
¿Cuánto vale?
Pero a veces, las cosas no son tan simples: estamos en el terreno de juego y queremos comprar una lampara que nos encanta. ¿Cuánto es un precio razonable? ¿10 euros? ¿5? ¿30? No tenemos ni idea…
Para ello, podemos usar diferentes técnicas, la más sencilla es estar al tanto de otros compradores negociando por estos mismo objetos y ver en cuánto cierran la compra. Aunque esto no nos asegura nada, sabremos un valor por el que el vendedor está dispuesto a vender.
Otra técnica que nos suele funcionar bien para objetos bastante comunes es intentar buscar el precio inferior en varios puestos. Por ejemplo si creemos que un objeto debe valor unos 10€, vale la pena intentar 5€ en uno de los puestos como última oferta. Si el vendedor considera que es un valor muy bajo, sencillamente cancelará la negociación y sabremos que debemos ofrecer más. Podemos probar esto mismo con 7€ en otro puesto y ver si el vendedor está abierto a aceptar.
En cualquier caso usemos el sentido común y no intentemos ofrecer precios tan bajos que puedan parecer ofensivos al vendedor, ya que le estaremos transmitiendo que su producto no tiene valor, algo que queremos evitar para no ser irrespetuosos.
3. Establecer contacto
Antes de empezar a hablar de dinero, deberemos entender el contexto. A veces querremos negociar el precio en un zoco bullicioso de gente, o en una tienda de alfombras con una atención más personalizada donde nos invitarán a un rico té verde. En cualquier caso, hay una serie de pautas que vale la pena seguir antes de hablar de dinero.
Durante los preliminares, es muy posible que nos pregunten cosas sobre nosotros: de dónde somos, cuál es nuestro equipo de fútbol favorito, etc. No nos alarmemos: en Marruecos nos recibirán bien, con educación y calidez. Y a su vez, esta información le dará al vendedor información de nosotros: nuestro posible nivel adquisitivo, nuestros gustos, necesidades, etc.
Cuidado con lo que proyectamos de nosotros
Posiblemente el precio de partida será más alto si somos de América del Norte que de España. Y si sabe que es nuestra primera vez en Marruecos, también será más alto al percibirnos como novatos.
Y nosotros deberíamos hacer lo mismo, desde un punto de vista educado, intentar conocer más a nuestro vendedor: cómo le va el negocio, que tal la familia, etc.

Toda esta información subjetiva nos valdrá a nosotros y al vendedor para negociar de forma más eficiente. Aunque recordemos: ellos se dedican a ello y conocen todos los entresijos, por lo que partimos en total desventaja. No por eso vayamos a dejar de disfrutar del proceso 😉
En muchos casos nos contarán historias alrededor del producto que queremos comprar: historias increíbles sobre los beduinos que usaron esa misma alfombra que nos ha encantado, o esa daga antigua bereber que utilizó el bisabuelo del vendedor para alguna épica hazaña 🏜. En cualquier caso, será difícil comprobar su veracidad y deberemos usar nuestro instinto o buena fé.
En resumen, disfruta de todos esos preliminares alrededor de la compra, donde aprenderemos historia y cultura del lugar, algo que a veces por sí mismo tiene ya mucho valor.
4. Negociemos
Una vez que ambas partes tienen suficiente información, de forma natural empezarán a aparecer los números 💸. Por supuesto, la primera oferta del vendedor será significativamente alta, y ahí, con la información que hayamos compilado en los primero pasos, empezará todo.
Durante el proceso, deberemos tener más o menos claro cual es el máximo que estaríamos dispuestos a pagar por la compra y ofrecer valores bastante inferiores a este número. Si la negociación progresa de forma natural, tanto el vendedor como tú os iréis acercando a los valores que tenéis en mente.

Recuerda que si hemos proyectado una imagen de occidental con dinero es posible que su oferta inicial sea muy alta pensando que vamos bien de recursos económicos. Por otro lado, si hemos detectado que el vendedor pueda necesitar con urgencia vender el objeto, tendremos más margen para negociar.
Gestiona el interés con cuidado: los vendedores son realmente buenos en lo suyo y si mostramos un gran interés en un artículo les daremos más herramientas a la hora de apretarnos el precio. A veces vale la pena empezar a negociar un objeto secundario para luego saltar al que realmente estamos interesados.
5. Respeta y sé ético
El proceso de negociación puede ser divertido y estimulante. Cuando entramos en modo «negociador», podemos perder contexto de dónde estamos y cuál es nuestro propósito. El proceso de negociación es un intercambio cultural y humano. Y ahí es donde damos una serie de consejos basados en nuestros viajes previos:
- Cuando negocies, se respetuoso y no te pases de listo. Si nos ofrecen esa lampara a 300Dh (unos 27€) , ofrecemos 10Dh, (menos de 1€), puede parecer que somos ignorantes y nos pueden contraofertar unos 250Dh (unos 23€). Pero si seguimos ahí y ofrecemos 15Dh (unos 1.5€), puede parecer que estamos faltando el respeto al producto o vendedor y se acabará ahí la negociación. Evitemos estas situaciones incómodas.
- A veces podremos perdernos en la negociación y darnos cuenta que estamos regateando por 1Dh (menos de 10 céntimos) un objeto determinado. Valoremos si tiene sentido pelear esto, ya que para nosotros esa diferencia no es significativa y para el comprador puede ser bastante relevante.
- Si notas una clara necesidad (no avaricia) por parte del vendedor, valora si tiene sentido pelear demasiado el precio. A veces vale la pena ceder, esto no nos hará ni perdedores ni peores personas! Además, en muchos casos podremos percibir que estamos pagando la experiencia, la amabilidad y las historias del vendedor.
- No tomes al vendedor por tonto: muchos vendedores no han salido de su país, pero eso no nos da autoridad para intentar vernos por encima de ellos. Los vendedores son personas con amplia experiencia en negociar y en muchos casos hablan más de 2 o 3 idiomas. Están adaptados perfectamente a su tierra y economía, por lo que en este caso los que deberemos aprender somos nosotros de ellos!
Por lo general, disfruta del todo el proceso e intenta verlo como un intercambio cultural donde podremos compartir y conocer las experiencias valiosas de la otra persona!
Y si estás buscando qué hacer en Marruecos, echa un vistazo a nuestra entrada sobre qué hacer en Marruecos en 7 días! O consulta nuestras próximas salidas aquí.